Enfermedad neutrofílica crónica con pustulación recurrente, superficial, estéril y de curso ondulante.
Dermatosis pustulosa crónica caracterizada por pústulas flácidas subcórneas, con tendencia a confluir en lagos de pus, generalmente en tronco, flexuras y abdomen.
Se asocia con:
IgA monoclonal (gammapatía monoclonal IgA)
Enfermedad neutrofílica sistémica
Enfermedad inflamatoria intestinal
Artritis seronegativas
Medicamentos (yoduros, TNF, etc.)
Ningún tratamiento tiene aprobación específica.
Toda la terapéutica es off-label.
Organizado por potencia y evidencia real.
50–150 mg/día
Respuesta rápida y sostenida.
Controla las recaídas en la mayoría de pacientes.
Monitorizar hemólisis, metahemoglobina y G6PD.
➡️ Sigue siendo el fármaco de referencia en DPS.
Prednisona 0,5 mg/kg/día (ciclos cortos)
Mejoran bien la inflamación aguda, pero no son buen tratamiento crónico.
Útiles como puente al iniciar dapsona u otros inmunomoduladores.
Acitretina 0,3–0,5 mg/kg/día
Isotretinoína 0,5–1 mg/kg/día
Muy eficaces especialmente en DPS crónica o resistente a dapsona.
Reducen formación de pústulas y normalizan queratinización.
➡️ Mejor evidencia entre los no-dapsona.
0,6–1,2 mg/día
Acciones anti-MPO y anti-neutrofílicas.
Útil en combinaciones y en pacientes que no toleran dapsona.
Doxiciclina 100 mg/día o 100 mg/12 h
Minociclina 100 mg/día
Modesto efecto anti-neutrofílico.
Útiles en DPS leve o moderada.
2–4 mg/kg/día
Respuesta rápida en casos graves o ulcerados.
Alternativa en intolerancia a dapsona o retinoides.
10–25 mg/semana
Buen control en DPS crónica persistente.
Menos eficaz que dapsona, pero útil en formas refractarias.
1,5–3 g/día
Excepcionalmente útil en DPS asociada a conectivopatías o gammapatía IgA.
Efecto sostenido sin necesidad de corticoides.
Infliximab 5 mg/kg semanas 0, 2, 6 → luego cada 8 semanas
Adalimumab 40 mg/semana o cada 2 semanas
Etanercept 50 mg/semana
Muy eficaces en:
DPS asociada a IgA monoclonal
Enfermedad inflamatoria intestinal
Paniculitis neutrofílicas coexistentes
➡️ Uno de los mejores grupos terapéuticos en refractaria junto a dapsona y retinoides.
Anakinra 100 mg/día SC
Canakinumab 150 mg cada 4–8 semanas
Alta eficacia en DPS dentro del síndrome neutrofílico.
Control casi inmediato de fiebre, dolor y pustulación.
Resultados sobresalientes en DPS refractaria con gammapatía IgA.
Alta eficacia en variantes neutrofílicas recalcitrantes.
Control prolongado de brotes.
Alternativa potente cuando anti-TNF fracasa.
➡️ Los JAK inhibidores son hoy la terapia emergente más prometedora en DPS refractaria.
Rituximab
Útil en DPS asociada a gammapatía IgA o conectivopatía.
IVIG (Inmunoglobulinas IV)
Casos severos con enfermedad sistémica asociada.
Talidomida 50–100 mg/día
Lenalidomida 5–10 mg/día
Eficaces en variantes neutrofílicas crónicas, aunque reservados por toxicidad.
Diagnosticarla como psoriasis pustulosa o infección.
Usar antibióticos prolongados sin base clínica.
Dependencia prolongada de corticoides.
No investigar IgA monoclonal (muy importante).
Infravalorar la utilidad de retinoides o dapsona.
La DPS es una dermatosis neutrofílica estéril: los antibióticos no mejoran salvo efecto antiinflamatorio.
Dapsona sigue siendo el tratamiento más efectivo y rápido; cuando funciona, lo hace en pocos días.
Los retinoides son la mejor alternativa en pacientes que no toleran dapsona o tienen G6PD baja.
La DPS asociada a IgA monoclonal responde extraordinariamente bien a anti-TNF y JAK inhibidores.
Las variantes recalcitrantes suelen requerir inmunoterapia avanzada: IL-1, TNF o JAK.
Cuando la DPS aparece en un adulto mayor, siempre descartar gammapatía o trastorno hematológico.
La fototerapia suele empeorar la pustulación: evitar UVA/UVB en fases activas.
Anakinra es sorprendentemente eficaz en DPS neutrofílica con fiebre, dolor y elevación de reactantes.
«La dermatosis pustulosa subcórnea es una enfermedad neutrofílica crónica que responde de forma excelente a dapsona o retinoides, pero cuyo control refractario se basa hoy en anti-TNF, inhibidores de IL-1 y, cada vez más, JAK inhibidores.»